Rubén Sosa, médico pediatra e infectólogo, nació en Buenos Aires en 1957. Hijo de una familia humilde, desde muy pequeño supo que quería ser médico.
Trabajó como asesor en el Hospital Churruca y en el Hospital General de Niños Dr. Pedro de Elizalde, donde atiende desde hace 35 años.
Su ilusión:
ver a sus pacientes en una situación
que no estuviera relacionada con la enfermedad y el dolor.
Desde la primera barrileteada,
llevada a cabo en 1994 con la participación de
alrededor de 50 personas,
a la última, en la que se reunieron cerca de 6.000,
pasaron miles de conmovedoras historias muchas de las cuales
Rubén Sosa recoge en sus libros:
-Historia de un barrilete, Historias de cal y arena I y II, y
De hieles y mieles-, cuya recaudación es donada íntegramente a los hospitales públicos.
“UN ABUELO, UN PADRINO DE VUELO”
“¿Cómo les hago entender a los chicos que hay personas mayores que están solas que necesitan compañía?”, se preguntó una tarde.
Ese fue el disparador para la campaña que unió a 600 abuelos con miles de niños. Junto al grupo comunitario del PAMI y a la agrupación BATOCO (Barriletes a Toda Costa), armó talleres de barriletes en geriátricos, luego convocó a niños y familias.
-“Venite. Hay alguien que está construyendo un barrilete para vos”-
“¿Y cómo voy a saber cuál es el mío?, preguntaban los chicos.
“Porque estará escrito en el barrilete”, aseguraba el Dr. Sosa.
Los niños llegaban y buscaban en el aire su juguete remontado. Una vez que lo identificaban por su nombre, seguían el hilo que lo sostenía y encontraban finalmente a su padrino para iniciar una conversación.
“Este es mi barrilete, yo lo dono al viento.
Ahora si querés, usalo vos”.
(Mensaje de los barriletes)
INICIATIVA “¿QUÉ ENTIENDO POR LA DONACIÓN DE ÓRGANOS?”
“Los invité a remontar un barrilete y les propuse que cuando yo tocara la bocina, el que quisiera, podía cortar el hilo de su cometa, para que el viento se lo llevara.
Ese día se creó el primer listado único de donación de células de la médula ósea. Las 85 primeras personas que se anotaron, lo hicieron luego de la barrileteada.
PROYECTO LAURA: “LOS ÁRBOLES URGENTE RECLAMAN AYUDA”
“Los niños crearon un bosque, de un día para otro, hicieron ecología con sus propias manos” y cada uno puso su nombre en un tutor de madera que el Dr. Sosa les había entregado en la consulta.
Además, les daba una carta que incitaba a reflexionar sobre el hecho de perpetuarse a través de la plantación de un árbol y sobre la colaboración hacia su tierra. Esta campaña se repitió en la laguna Saladita Norte inaugurando el primer bosque solidario de la República Argentina.
JUEGO Y COLORES:
LAS PAREDES Y TECHOS DEL SECTOR DE PEDIATRÍA
DEL HOSPITAL ELIZALDE
El Dr. Rubén Omar Sosa, junto a integrantes del equipo del Departamento de Infectología del Hospital Pedro de Elizalde. Hospital en donde trabaja desde hace más de veinticinco años.
Hospitales más alegres
La provincia de Buenos Aires sancionó una ley que estipula que todos los servicios pediátricos de los hospitales cuenten con clowns y ya hay proyectos similares en otras tres provincias
Fuente: Andrómaco, por Susana Rigoz, La Nación