La Dra. Mirta Averbuch, Docente del Departamento de
"Lo ideal es tomarse quince días en el verano (porque
calor nos cansa más y los días son más
largos) y
guardarse el resto para disfrutar durante el año.
Es bueno
tomar más descansos, aunque sean cortos,
y repartir anualmente el
total de los días vacacionales".
Alejarse de la rutina
beneficia psíquica y físicamente:
mejora el humor, la memoria y el
estado emocional.
Al regresar, las personas se sienten más sanas y
se ha
demostrado que incrementan la creatividad.