Hace 4 cortadas a la cebolla y le echas vinagre.
Minutos después…
Esto es perfecto para la fiesta de asado.
A mi me encanta la cebolla, aunque siempre me pone a llorar.
El sabor de este vegetal es tan rico que vale la pena las lágrimas.
Cuando vi esta receta me puse muy contenta, porque me parece genial.
No sólo sabe rico, también se ve super hermoso.
Parte cada cebolla en cuatro, haciendo como en la foto.
Pero no partas hasta el fondo,
la cebolla tiene que quedar entera.
Luego parte cada parte otra vez para que queden ocho pedazos, como en la foto.
Pon las cebollas en un recipiente y echa 3 cucharadas de aceite de oliva.
Luego echa 2 cucharadas de aceite balsámico.
Revuelve bien.
Pon las cebollas en otro recipiente con un poco de grasa.
Échales lo que queda de la salsa.
Échales un poco de sal y pimienta.
Ponle papel alumino y mete las cebollas al horno por 25-35 minutos en 220 grados hasta que las cebollas se abran como flores y estén blanditas.
Deben quedar así.
Luego metelas al horno sin el papel alumino por 10 minutos más. Sirve las cebollas con alcaparras, si te gusta.
También puedes servirlas como acompañante para resto de la comida. ¡Bon appétit!