FREGADERO DE ACERO

Toscana, Italia

Con el tiempo los fregaderos de acero tienden a volverse mates y perder el bonito brillo que tenían cuando estaban nuevos. Para que el tuyo vuelva a relucir, lávalo bien con detergente, aclara y sécalo con un trapo. 
Pasa después un paño empapado en alcohol o en vinagre blanco. Verás que rápido recupera su brillo. Si lo secas con un papel de periódico, no necesitarás ningún producto más para que queden impecables y sin restos de gotas.